Mateo 2, 1, 9-11
¿Dónde está el rey de los judíos que ha nacido? Porque
hemos visto su estrella en Oriente y venimos a adorarlo.
La estrella que habían visto en Oriente iba delante
de ellos, hasta que se paró sobre el lugar en que estaba el niño. Al ver la
estrella se alegraron mucho, y habiendo entrado en la casa, hallaron al niño que
estaba con María, su madre. Se postraron para
adorarlo, y abriendo sus cofres, le ofrecieron regalos: oro, incienso y
mirra.
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A veces hay acontecimientos, experiencia y personas que
son los medios que la vida utiliza para guiarnos y dirigirnos hacia Jesús y lograr
la transformación de nuestra persona como tal ser. El nacimiento de Jesús ha sido y debe ser
ese gran único y especial acontecimientos que transforme tu vida.
En cada acontecimiento siempre habrá señales que indicaran
el camino correcto a seguir, solo basta estar atento y dispuesto a seguir estas
señales
Así como la estrella de Belén guio a los Reyes hacia
Jesús, así mismo las experiencias de la vida diaria son la estrellas que te guían y
dirigen al encuentro con Jesús. Permite que estas experiencias sean la luz que dirijan
tu vida y caminar hacia un nuevo comienzo lleno de entusiasmo, esperanza, amor
y paz.
Cuando encuentres ha Jesús póstrate a sus pies amalo,
adóralo, abre el valioso cofre de tu vida y ofrece y dale lo mejo de ti. Dentro
del cofre de tu valiosa, y especial vida
hay munchas joyas y tesoros que dar a Jesús.
Permite que Jesús nazca en ti para que sea lleno de esperanza,
amor paz y alegría infinita.
Celebremos con gran entusiasmo, esperanza y amor este
gran y especial acontecimiento del Día de Reyes.
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