domingo, 14 de junio de 2020

Quítate el vestido de luto




Salmo 30, 11

Convertiste mi luto en alegre danza. Me sacaste el vestido de luto y me vestiste de alegria.

Mateo 5, 12



Tengan esperanza y estén alegres

La alegría es el estado de regocijo interior que nos hace sentir vivos y equilibrados; es una excitación que produce placer y felicidad y es un sentimiento grato que nos obliga a ver el lado optimista, esperanzador y positivo de la vida.

Quitate el vestido de luto y ponte el vestido de la alegría.  Basta ya de luto (quejas, lamentos, tristeza, angustia, desesperación, ansiedad, desesperanza, depresion, baja autoestima, autocompasión, soledad, temor, enfermedad). Desprendete de ese vestido de luto. Ese no es tu vestido. Dios tiene un vestido nuevo para ti, el vestido de la alegria y de gozo. Cambiate de vestido. Ánimo, brilla resplandece, Llénate de gozo. El gozo del Señor te quita el luto, renueva tu corazón, te da vida, fortaleza y victoria en medio de las situaciones difíciles y dolorosas de la vida diaria. Tu eres especial para Dios y él te quiere llenar del oleo del gozo y de la alegria. Llenate de alegría, alabanzas, risas, aplausos.  Danza, baila, grita de júbilo. Que se te note el gozo y la alegria. Un corazón alegre embellece el rostro. Dios te quiere ver alegre.

Beneficios generales de la alegría:

Eleva el nivel de autoestima y la autoconfianza. Fomenta bienestar paz y amor. Favorece el equilibrio entre la mente y el cuerpo y el bienestar general interno. Permite un manejo saludable y efectivo del estrés. Fomenta el compartir y las relaciones interpersonales. Fomenta sentimientos y pensamientos positivos. Fomenta la creatividad. Brinda ánimo y energía para el logro de metas.


Disminución de la presión arterial. Mejora el rendimiento físico y mental. Alivia el dolor. Reduce el estrés. Relaja y rejuvenece. Fortalece el sistema inmunológico

María Díaz. Enfermera y Coach de Vida

miércoles, 10 de junio de 2020

Ten un corazón


Proverbios 4, 23

Antes que nada guarda tu corazón, porque de él mana la vida

Ten un corazón fuerte y sereno ante las dificultades

Ten un corazón firme y perseverante ante las derrotas y las caídas

Ten un corazón compasivo y piadoso ante el dolor del que sufre.

Ten un corazón noble y desprendido ante la pobreza.

Ten un corazón valiente ante el propio sufrimiento

Ten un corazón generoso ante la necesidad del projimo

Ten un corazón alegre ante el desaliento.

Ten un corazón amoroso ante la crítica, la calumnia, el desprecio y el rechazo.

Ten un corazón sincero ante la hipocrecia.

Ten un corazón feliz ante la soledad, olvidos e indiferencias de los demas para contigo.

Ten un corazón optimista ante las pérdidas

Ten un corazón de acogida y aceptación ante el discrimen, la marginación y el rechazo.

Ten un corazón agradecido ante el favor que te hacen los demás

Ten un corazón paciente ante la desesperación

Ten un corazón obediente ante los mandatos y las leyes divinas y terrenales

Ten un corazón perseverante ante la obstaculos.

Ten un corazón semejante al de Dios para que siempre vivas en amor, poque Dios es amor.

María Díaz. Enfermera y Coach de Vida

martes, 9 de junio de 2020

Felicidad y Seguridad en la Presencia de Dios


Busca el apoyo de Dios desde temprano en la mañana, llénate de su amor y sientete feliz en su presencia para que vivas en todo momento del día en amor, alegría, fe, seguridad  y esperanza.

Salmo 84, 6, 13
Dichosos los que encuentran en Dios sus fuerzas. Felices los que ponen en Dios su confianza.


sábado, 25 de abril de 2020

Serenidad Fuente de Calma Ante Lo Inesperado

Filipenses 4, 6-7
Alégrense en el Señor en todo tiempo. El Señor está cerca, no se inquieten por nada. En cualquier situación recurran a la oración y a la súplica junto a la acción de gracias, para presenter sus peticiones a Dios. Entonces la paz de Dios, que es muncho mayor de lo que se pueden imaginar, les guardará su corazón y sus pensamientos en Cristo Jesús.

Que es serenidad - permanecer en calma y en control en medios de las situaciones inesperadas difíciles y dolorosas.

En la vida nadie esta excepto de que le sucedan crisis, y al surgir, la mente genera una serie de reacciones para liberar dolor, tristeza frustración, coraje, miedo y otros. Todas estas emociones y sentimientos que surgen hemos de transformarlos con acciones a nuestro favor que produzcan serenidad. Mantener la calma no es fácil, requiere de práctica, paciencia, fortaleza y fuerza de voluntad, sin embargo utilizando estrategias adecuadas y efectivas podemos lograr transformar las crisis en experiencias de aprendizaje que brinden el beneficio de vivir en armonía y que dirijan hacia la satisfacción y el bienestar.

Estrategias:

Identificar las señales de alarma identificar cómo reacciona el cuerpo ante una situación dificil e inesperada (pulso acelerado, nerviosismo, náuseas, tensión muscular, aumento en tono de voz o enmudecer, intranquilidad, agresividad y munchas más  

Respirar y contar hasta 10. Esto evita decir o hacer algo de lo que luego te arrepentirá

La respiración calma cualquier emoción y provee control

Realizar respiraciones profundas, desde el abdomen, inhalando por la nariz y exhalar con calma por la boca.

Transformar los pensamientos: Traer a la mente pensamientos positivos

Si es posible alejarse de la situación: buscar un lugar tranquilo donde te sientas cómodo, tranquilo y seguro.

Realizar alguna actividad: leer, ver televisión, hacer manualidades, escribir, hacer ejercicio, caminar, correr, dar un paseo, nadar, bailar, practicar algún deporte de su preferencia.

Desconectar la mente: es traer a la mente imágenes que te brinden calma y paz

Aceptar la situación y analizarla de manera realista y objetiva: aceptar y enfrentar la realidad de la situación tal cual se presenta sin falsas o erróneas expectativas.

Mantener actitud de fortaleza, visualizarse como una persona fuerte capaz de enfrentar y superar efectivamente la situación.

Perdonar, olvidar y mantener el buen sentido del humor: no recordar tanto lo que paso, más bien apreciarlo desde el lado positivo, por el aprendizaje adquirido. Siempre se aprende algo de cada experiencia vivida.

Ver la situación como algo externo: es tomar distancia emocional, lo que ayuda a pensar con claridad e identificar soluciones. Es no fijar la mente solo en la situación, es mantener en control de los pensamientos, es tomarse momentos de distracciones positivas y saludables.

Aplicar estrategias utilizadas en un pasado en momentos difíciles.

Tomar acción: identificar soluciones y actuar.

martes, 7 de abril de 2020

Llena tu espacio de la presencia de Dios


Llena tu espacio de la presencia de Dios para que puedas responder a esta crisis y prueba de fe con una actitud de serenidad, basada en la esperanza. Permite que la paz y la serenidad se apoderen de ti. Ten Paz, Ten Fe, Ten Esperanza. La esperanza y la fe no defraudan. Recibe un abrazo solidario a la distancia lleno de paz y el amor de Dios. Dios te Bendiga, te cuide y te proteja.

lunes, 30 de marzo de 2020

Quedate en tu casa


Quedate en tu casa y evita que te pongan una corona que no es tuya que no te pertenece, la corona del virus. Rechaza esa corona en el Nombre del Señor. En la alegria del Señor quedate en tu casa y tendras la corona que si te pertenece, la corona de la salud y de la paz.

jueves, 2 de enero de 2020

Señor y mi Dios quiero permanecer contigo


Señor quiero permanecer en ti en lo bueno, y en lo tan bueno. Que siempre desee estar contigo. Que tu sigas siendo lo primero y más importante. Que siempre seas mi prioridad por encima de todos y de todos. Ayudame a desprenderme de afectos superficiales, temporeros e inestables. Que siempre reconozca que lo único verdadero y estable eres tu. Tu que nunca pasas. Tu que no buscas reconocimiento. Tu que te das desinteresadamente. Tu que siempre eres el mismo y nunca te ocultas detrás de máscara y falsas apariencias. Tu que siempre estas presente. Tu que sabes valorar, recibir y agradecer por siempre nuestros detalles hacia ti. Tu que nunca ignoras nuestras tristezas y pesares. Tu que nunca nos desprecias y nos abandonas. Tu que no haces diferencia entre personas y nos acoges a todos por igual. Tu que no te averguenzas de quien es diferente por alguna razon. Tu que no critícas ni te burlas de nuestra apariencia. Tu incondicionalmente siempe nos extiendes tu mano para levantarnos en nuestras caídas. Tu que misericordiosamente nos provees en nuestras necedidades. Tu que siempre pero siempre nos acompañas en nuestra soledad. Tu que nos reconoces cuando los demas nos ignoran. Tu que corriges con amor y ternura. Tu que nos disciplinas a través de tu Palabra. Tu que no pones excusas para que no te busquemos o no visitemos. Tu que nos recibes con agrado a toda hora, momento o lugar. Tu que te alegras y agradas de nuestra compañia. Señor y mi Dios por eso y por muncho más quiero permanecer siempre contigo. (María Díaz)