martes, 30 de abril de 2019

Rechazando a los intrusos que roban la paz y salud.


Intrusos espirituales
Desesperanza, Falta de fe, Desconfianza, Desesperación
Ceguera y sordera spiritual, Desobediencia, Orgullo, Soberbia

Intrusos emocionales
Ansiedad, Miedo, Confusión, Envidia, Celos, Pereza, Vagancia
Tristeza, Ira, Angustia, Depresión y munchos más

Intrusos corporales
Dolores, Cansancio físico y mental, Debilidad corporal, Enfermedades, Insomnio

Como rechazar estos intrusos,
Diariamente acudir en oración a la presencia de Dios
Siendo sensible a las manifestaciones del Espíritu Santo
Venciendo el orgullo y la soberbia mediante la humildad
Rechazar todo pensamiento negativo de derrota y de enfermedad.
Cultivar actitud y pensamientos de optimismo
Humillarse ante la Presencia Santa.
Dejarse transformar por la fuerza de la gracia divina.

Tu y solo tu tienes el control de tu espíritu, tu mente y tu cuerpo. Empieza ya, ahora mismo y toma el control y la autoridad para rechazar todo aquello que te roba la paz y la salud.
(Efesios 4, 22 Ustedes tienen que dejar su manera anterior de vivir, el hombre viejo, cuyos deseos engañosos lo llevan a la destrucción. Dejen que su mente se haga más espiritual para que tengan nueva vida.)

En autoridad lleva cautivo a obediencia de Cristo todo lo que se levanta en contra de la voluntad de Dios para ti.

Acude en oración a la presencia de Dios, sumergete en su Misericordia y reclama tu libertad espiritual, emocional y física. (Efesios 6, 18 Oren en todo tiempo segun les inspire el espíritu. Prosigan en en sus oraciones sin desanimarse)
(Siracides 51, 29 Que su alma halle su alegria en la misericordia del Señor)

Deja ya y de una vez de ser esclavo de los intrusos que te roban la paz y la salud. Tu tienes el poder para rechazarlos y sacarlos de tu espíritu, de tu mente y de tu cuerpo. (Gálatas 5, 1
Cristo nos liberó para que fueramos realmente libres. Por eso, manténganse firmes y no se sometan de nuevo al yugo de la esclavitud.)

Asi como proteges tú casa y no permites que ningun extraño entre a robar, así mismo has de protejer tu espíritu, tu mente y tu cuerpo para que nada ni nadie te robe la paz y la salud.
Levanta el escudo de la fe y vence todo dardo que el enemigo te envie para desanimarte y robarte la paz y la salud. (Efesios 6, 10-11 Haganse robustos en el Señor con su energía y su fuerza. Pónganse la armadura de Dios para que en el día malo puedan resistir)

Manten tu mente y tu espiritu en la dirección correcta. Practica ser optimista en cada situación que surja inesperadamente, aunque lo que este sucediendo en tu vida no se agradable, espera algo bueno y ten la fe y la confianza de que Dios lo transformara en bendición (Romanos 8, 28 Dios dispone todas las cosas para bien de los que lo aman)

Maria Diaz