La
familia es la primera responsable de la educación. Toda tarea educadora debe
capacitarla a fin de permitirle ejercer esta misión (Puebla – 1036)
El
objetivo de toda educación genuina es humanizar y personalizar al hombre sin
desviarlo, antes bien, orientándolo
eficazmente hacia su fin último trascendiendo la finalidad esencial del
hombre. La educación resultará más humanizadora en la medida en que más se abra
a la trascendencia es decir, a la verdad
y al Supremo Bien. (Puebla –
1024)
La
educación humaniza y personaliza al hombre cuando logra que éste desarrolle
plenamente su pensamiento y su libertad, haciéndolo fructificar en hábitos de comprensión y de comunión con la totalidad del orden real
por los cuales el mismo hombre humaniza
su mundo, produce cultura, transforma la sociedad y construye historia. (Puebla - 1025)
¿Qué es educación humana?
Es una
educación dirigida hacia la humanización de la persona a fin de que se
desarrolle y se forme en un ser humano con pensamientos, sentimientos,
actitudes y valores enfocados hacia la responsabilidad personal y social, el
respeto, la honestidad, la tolerancia, compresión, y valor de sí mismo y de los
demás, empatía, altruismo y convivencia fraternal. Es orientar y guiar a la
persona hacia un estilo de vida basado en el amor y con un alto sentido de integridad moral que le provea
y le aporte al desarrollo de una inteligencia emocional en donde aprenda a
superar conflictos, controlar y manejar, sus emociones y las de los demás de manera
saludable, efectivas, capaz de convivir en sociedad de manera pacífica,
constructiva y productiva.
La
educación humana ha de estar basada en el amor,
respeto y valor hacia el ser humano, reconociéndolo en todo momento como un ser
con grandes e ilimitadas potencialidades
capaz de lograr su superación y expansión humana en todas sus dimensiones.
La
educación humana ha de tener como objetivo el procurar conocer al ser humano
para así poder comprender su realidad y guiarlo hacia la propia identificación
de su yo interior y descubra su razón de ser, hacer, tener y pertenecer.
La
educación humaniza al ser humano cuando le provee para que adquiera valores que
guíen, y dirijan su conducta,
comportamientos y la vida misma hacia
una transformación, realización y perfección en todas sus dimensiones.
Para
que la educación humana sea efectiva se ha de eliminar todo acto de, crítica,
burla, marginación, amenazas, castigos y de violencia en todas sus formas y
manifestaciones.
Siendo
la educación un instrumento necesario y valioso para la provisión de
conocimientos de muchos aspectos, esta ha de comenzarse a proveer desde la
niñez temprana.
Tanto
la familia, escuelas, iglesia y la sociedad han de ser agente colaboradores y
portadores en la provisión de la
educación en esta etapas tempranas. Esto es necesario para que la persona desde
su niñez crezca al amparo de unos conocimientos que le provean para la
valorización y concientización de la importancia del respeto hacia los valores
morales. La importancia de esto, es que
desde la niñez las personas crezcan y se desarrollen con un alto, firme y
constante sentido integridad moral que le provea para el respeto de los
demás y sobre todo el respeto y valor
hacia sí mismo. Esto le permitirá el desarrollo de una alta autoestima, que a
su vez contribuirá a que se desarrolle con un gran deseo de superación para el logro
de sus metas y objetivos durante toda su vida, siendo siempre una persona en
contante progreso hacia su crecimiento personal.
La
provisión de la educación humana además es necesaria porque le aporta a la
persona para el desarrollo,
concientización y valorización de sus potencialidades y capacidades de
funcionamiento integral que a la vez le
permite a la persona una integración familiar y social funcional, productiva,
efectiva, que le conduce a un progresar por el camino hacia su crecimiento personal.
Siendo
la familia la mayor responsable de la provisión de la educación humana, estos
han de valorizar, concientizar y educar. Es de gran importancia que le binde
especial atención a la satisfacción de las necesidades de maneras individual
para cada niño(a). Un aspecto bien importante es que los padres han de brindar
especial atención e importancia al desarrollo de las capacidades y
potencialidades del niño (a) presentada en cada etapa de su crecimiento y
desarrollo. Esto con el fin de que al niño(a) no se le impida y/o limite su
crecimiento y desarrollo y este tenga un
desarrollo integral hasta su vida
adulta.
Para
que esta educación sea efectiva se ha de creer en el gran potencial que tiene
la persona para ser y hacer y se debe transmitir esta convicción a la persona
como tal durante sus interacciones con este. Además se ha de brindar
retroalimentación positiva, ya que esto contribuye al desarrollo de autoestima
saludable. Se la ha de brindar atención y
participación activa para que se sienta que es importante y que tiene
sentido de pertenencia. Se debe evitar el favoritismo ya que contribuye al
desarrollo de patrones de conductas, emociones y sentimientos negativos y
provocando aislamiento en unas personas y orgullo y egocentrismo en otras. Es
de gran importancia fomentar disciplina, obediencia y explicar las normas. Es
necesario dialogar y explicar sobre las expectativas que se esperan de la persona, ya que contribuye al desarrollo
de la motivación, al deseo de superación y a la valorización de sí mismo.